¿Cómo cambio la literatura? De un reto entre amigos, para ver quien escribía la mejor historia de terror, Mary Shelley concibió la historia de ”Frankenstein”, inspirada en una pesadilla que tuvo a sus 18 años y por las conversaciones sobre la galvanización y los experimentos científicos de la época.
“Vi, con los ojos cerrados, pero con una nítida imagen mental, al pálido estudiante de artes impías, de rodillas junto al objeto que había armado. Vi al horrible fantasma de un hombre extendido y que luego, tras la obra de algún motor poderoso, éste cobraba vida, y se ponía de pie con un movimiento tenso y poco natural. Debía ser terrible; dado que sería inmensamente espantoso el efecto de cualquier esfuerzo humano para simular el extraordinario mecanismo del Creador del mundo“
Introducción de Mary Shelley, ‘’Frankenstein’’ edición 1831.
Lo que sería una historia corta, se convirtió en su primera novela, publicada en 1818. Esta obra maestra gótica ha trascendido y dejado una huella profunda en la cultura popular y en la exploración de temas como la ética científica, la responsabilidad humana y la búsqueda desmedida del conocimiento.
La vida y contexto de Mary Shelley en la creación de su obra:
Nació en 1797 en una familia intelectual y literaria de Inglaterra. Su madre era la filósofa feminista Mary Wollstonecraft, y su padre, el filósofo político William Godwin. La joven Mary creció rodeada de ideas revolucionarias y literatura, lo que influyó significativamente en su desarrollo como escritora.
A la edad de dieciocho años, Mary Shelley concibió la idea de “Frankenstein” durante un viaje a Suiza con su esposo, el poeta Percy Bysshe Shelley, y su amigo Lord Byron. Inspirada por una pesadilla y su conocimiento sobre los experimentos del filósofo del siglo XVIII Erasmus Darwin, sobre animar materia muerta y la posibilidad de devolver a la vida cadáveres o distintas partes del cuerpo., Mary dio vida a la historia de Víctor Frankenstein y su monstruosa creación.
Temas y análisis de “Frankenstein”:
a) La ambición científica y búsqueda del conocimiento: “Frankenstein” plantea preguntas profundas sobre los límites del progreso científico y la búsqueda desenfrenada del conocimiento sin tener en cuenta las consecuencias. La figura del científico imprudente y ambicioso encarnado en Víctor Frankenstein advierte sobre los peligros de jugar a ser Dios.
b) Responsabilidad y ética: La novela cuestiona la responsabilidad moral de los creadores hacia sus creaciones. Frankenstein, al abandonar a su monstruoso ser, demuestra la importancia de la empatía y consideración hacia los demás.
c) Alienación y soledad: El monstruo de Frankenstein, a pesar de su apariencia aterradora, busca comprensión y amor. La obra reflexiona sobre la soledad, el rechazo y la alienación que experimenta el monstruo y cómo esto lo lleva a la violencia y la desesperación.
El impacto duradero de “Frankenstein”:
a) Influencia en la literatura: “Frankenstein” es considerada una de las primeras novelas de ciencia ficción y ha influido en numerosos autores y obras posteriores. Su narrativa innovadora y exploración de temas profundos han dejado una marca indeleble en el género.
b) Reflexiones sobre la ética científica: La novela ha provocado debates y reflexiones sobre los límites éticos de la ciencia y la tecnología. El término “Frankenstein” se ha utilizado como metáfora para describir la creación irresponsable y los peligros de la manipulación genética e inteligencia artificial.
c) Relevancia cultural y popular: “Frankenstein” ha trascendido la literatura y ha permeado la cultura popular en diversas formas, desde adaptaciones teatrales y cinematográficas hasta referencias en música, arte y moda. El icono del monstruo de Frankenstein se ha convertido en un símbolo reconocible en todo el mundo.
Mary Shelley, a través de su obra maestra “Frankenstein”, ha dejado una marca en la literatura y en la exploración de temas universales. Su historia sobre la ambición científica desenfrenada y las consecuencias de la irresponsabilidad ha resonado a lo largo del tiempo y sigue siendo relevante en la sociedad actual. El legado de Mary Shelley perdura, recordándonos la importancia de la ética y la responsabilidad en nuestras búsquedas de conocimiento y creación.